Lo ha vuelto a hacer. Seguramente cuando vayáis a verla al cine veréis lágrimas y aplausos durante toda la película, porque Michael Moore vuelve a la gran pantalla con este documental sobre el sistema de salud estadounidense.
Me he bajado la película en DVD-Screener 10 días antes de su estreno en USA. Se dice y se comenta que el propio Michael a dejado la película en la red por si acaso la administración Bush vetaba su puesta en escena en los cines ya que están acosando al propio Moore por un viaje hecho a Cuba durante este documental y de haberse saltado el bloqueo, de hecho en la propia película el viaje desde Florida a Cuba está censurado según se dice a la hora y 42 minutos:
"Homeland Security Laws of the United State of America prohibit the filmmakers from revealing how they got to their destination"
Toma esa, país de las libertades (ya no se quien se cree eso). Pero aparte de la controversia creada por el viaje a Cuba y de como los médicos cubanos le hacen un PWND a los médicos estadounidenses, se puede ver como el sistema de salud de medio mundo le da mil patadas al americano que queda a ojos de este documental como un autentico país tercermundista explotado por las empresas farmacéuticas y las compañías de seguros, que o bien no tienes seguro y te cuesta 60.000$ reinplantarte un cacho de dedo perdido por la motosierra o bien lo tienes y te dicen que un tumor cerebral no es un riesgo vital y se quedan tan panchos sin que te paguen la atención medica con tal de maximizar sus beneficios.
También se da un paseo por la historia de como se llego ha este sistema medico partiendo de Nixon y como se intento crear una seguridad social por Hillary Clinton y de como esta idea fue satanizada con publicidad costeada por las principales agencias de seguros médicos. Una vez más la historia se repite y se ve como controlan a la gente mediante el miedo o desmoralizándolos.
La sensación que da este documental sobre la sociedad americana es de autentica pena, o lastima, o ganas de decir "joderos por lo que habéis votado", pero claro cuando aquí tenemos alcaldes que han ganado por mayoría absoluta las municipales después de haber sido condenados por casos de corrupción mejor me callo e iré buscando un país donde vivir que tenga un mínimo de cultura política. Preferiblemente con Michael Moore como presidente.
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